No tenías que haber pasado por eso, pero preferiste al chico alto de ojos azules.
Era el camino fácil, era el camino perdedor. Porque las apariencias engañan, el príncipe se convirtío en rana, y la rana degradó a maltratador.
Después, encontré un amor eterno, un amor mejor.
No tenías que haber pasado por eso, Princesa.
Simplemente; NI ÉL, NI YO.
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